Aquel 17 de enero de 2013 la jornada había arrancado temprano y tormentosa, con la presentación y clase de los micros de Radio por la Memoria que había hecho en Trancas. Terminado aquel encuentro, y con el cielo aclarando, volví a Raco -sede de Abrojos- para almorzar y tomar una siesta de postre. Al final fue una fruta, porque llegó la confirmación que esperaba y arranqué pal CIC de San Javier, Tucumán, en cuya puerta me estaba esperando Luis Cineros, Coordinador de la Radio Comunitaria FM San Javier.
La capacitación surgió charlando con Luis durante la radio abierta que compartimos en la Feria de Emprendedores de Raco: los realizadores de la radio comunitaria tenían clara la necesidad de mejorar la calidad de sus producciones, pero desconocían qué herramientas les hacían falta y cuál sería la manera de aproximarse a ellas: necesitaban un rumbo.
Trabajamos el paquete de contenidos vinculados a expresión radial (características del medio + lenguaje radiofónico = potencial expresivo), formatos y producción. Abrimos un poco el juego para salirnos del magazine y exploramos otras posibilidades de formato, aunque el foco se hizo en los procesos de producción –pensamos juntos cómo realizar un micro de Radio por la Memoria y elaboramos los pasos para pensar, planificar y poner al aire una entrevista como vía para entender la lógica del laburo de producción- y en la necesidad de, por ejemplo, realizar reuniones de preproducción con regularidad como paso inicial para mejorar sus contenidos y la posibilidad de explorar otras formas de ponerlos al aire, en lugar de llegar sobre la hora para intentar, sin éxito, resolver todo en el momento del aire.
A quienes en este momento se estén sonriendo por semejante obviedad, les advierto: la falta de atención, desvalorización o directamente desconocimiento de la instancia de producción -muchas veces llamada producción periodística- es absolutamente generalizada: especialmente en las radios privadas -donde la búsqueda de ganancia y el supuesto pago de sueldos genera un halo de profesionalismo que haría pensar lo contrario- no hay conciencia acerca de 1. la relevancia de la producción del contenido ni de 2. que por producción nos referimos a un proceso -pensar, proponer, realizar, poner al aire- realizado por profesionales idóneos y no a producción agropecuaria suponiendo, como ocurre, que crece de repollos. Sobre esto hablaremos en otra oportunidad.
En cualquier caso, los realizadores de FM San Javier son habitantes del pueblo homónimo, comprometidos con hablar de su comunidad desde su comunidad, que sostienen con su compromiso y esfuerzo una radio que está al aire desde hace más de 3 años y que, llegados a cierto punto en su crecimiento se propusieron buscar otras estrategias para seguir autosuperándose. Pocos tienen esa lucidez. Por eso los aplaudo, les agradezco la invitación y espero volver a verlos pronto.